Tienes en el armario un pantalón negro, una camisa roja, un jersey verde o unas sábanas granates. Y con el paso del tiempo, vas notando que los colores que antes eran intensos se van apagando poco a poco. Con las prendas blancas también ocurre algo parecido, pero en vez de perder el color, la prenda amarillea.

Hay varias razones por las cuales las prendas a la larga pierden algo de color. Lavar la ropa con un detergente que no sea el adecuado, frotar demasiado las manchas difíciles, lavar con agua extremadamente caliente, etc. Aunque a simple vista no notes que la prenda ha perdido su color, si comparas la misma prenda el día que la has adquirido, y su estado después de meses o años, verás que el tono es diferente.

Si quieres tener la seguridad de cuidar y alargar la vida de la ropa, sigue estos útiles trucos:

1. Tratar las manchas. Hay manchas que se agarran con mucha facilidad a los tejidos, como las de pintura o de lejía. Estas pueden arruinar la ropa si no se tratan al instante o con productos suaves que no alteren el color de la prenda.
2. Tener cuidado al secar al sol. El sol directo es perfecto para secar rápidamente las prendas y asegurarte de que mantienen completamente el aroma del detergente. Pero un sol muy intenso podría provocar descoloridos.
3. Lavar las prendas del revés. Dando la vuelta a las prendas y lavándolas del revés conseguirás proteger mejor tanto los colores como los dibujos de la ropa.
4. Utilizar detergentes adecuados: Como Detersolín Protect Ultracolor. Es el detergente indicado para proteger los colores intensos. Su composición se ha diseñado para limpiar y proteger las prendas de colores más exigentes. Además, aporta al tejido una protección adicional que evita el desgaste de las fibras.

Además, no olvides leer siempre las etiquetas con las instrucciones de lavado. Cada tejido tiene unas indicaciones de lavado y secado diferentes.

¿Qué otros trucos utilizas para proteger los colores de la ropa? ¡Queremos conocer tu opinión!

¡Hasta el próximo post!